El placer de comer picante
A muchos pueblos del mundo, sobre todo de regiones cálidas, les gusta disfrutar de una comida muy picante y a mucha gente, sobre todo de latitudes templadas, le parece esto una tortura auto infligida para cual no existe razón alguna. El ingrediente causante del efecto del picor es el chile o la guindilla (Capsicum annum). Los compuestos que le dan al chile sus propiedades irritantes son los capsaicinoides. Estos compuestos son producidos por ciertas glándulas en la placenta del chile, el sitio del fruto donde se producen las semillas. Éstas, por su parte, no contienen capsaicinoides y por lo tanto carecen de pungencia, aunque ocasionalmente pueden absorber estos compuestos como consecuencia de su proximidad a la placenta. Mientras en México, Tailandia y la India se consumen de 25 a 200 miligramos capsaicinoides al día, en Europa se consumen únicamente unos 1,5 miligramos/día.
El componente más importante es la capsaicina (8-metil-N-vanillil-6-nonenamida). Se trata de una sustancia lipofílica, inodora e incolora. Es irritante para los mamíferos, pero no para los aves que pueden repartir las semillas por un terreno más amplio que los primeros. Lo que la naturaleza no había previsto, era la adicción por gran parte de la humanidad a esta planta.
La capsaicina estimula nervios que normalmente detectan el calor. De esta manera provoca una impresión de calor. El cuerpo reacciona aumentando el riego sanguíneo para disipar el exceso de calor. Por esta razón enrojecemos y empezamos a sudar cuando nos damos un buen bocado de una comida picante. En este sentido nos refresca aunque tenemos la impresión contraria.
Al mismo tiempo el cuerpo quiere combatir el dolor de la quemadura imaginaria. Lo hace mediante el vertido de endorfinas. Las endorfinas fueron descubiertas en el año 1975 después de una búsqueda intencionada. Puesto que la morfina es una sustancia exógena (que se genera fuera del organismo) que tiene efectos sobre el cuerpo, se razonó acertadamente que el organismo tenía estos receptores para una sustancia endógena (producida dentro del organismo). La función de las endorfinas es la supresión de dolores. Personas que sufren una lesión muy grave no sienten dolor durante los primeros momentos por esta causa. También elevan la euforia, por ejemplo después de un gran esfuerzo (Runner’s High).
La capsaicina no solamente refresca nuestro cuerpo, por ahí su consumo en países cálidos, sino provoca también que una ola de felicidad recorra nuestras venas.
Nota: En casos de sobredosis de picante ayudan cosas que contienen grasa como yogur, leche o queso, pero bajo ningún concepto agua o bebidas basadas en agua como cerveza o vino, ya que la capsaicina no es soluble en agua, pero si en aceites y grasas.
Editado: 10 Sep, 2023
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